Las compus de mi vida

Me pongo Hardware con ese Software...

Ni hablar, me tocó nacer en la era de la computadora personal. Y por lo mismo me puse a reflexionar cuántas computadoras han pasado por mis pecadoras manos. Demasiadas, claro está. Pero puedo hacer un recuento de las que han sido mi propiedad. Dénse un quemón para que vean lo mucho que ha avanzado la humanidad desde principios de los 80 para acá:

La primera: Timex Sinclair 1000

La Sinclair 1000 y un juego. Nunca pude cargar uno.

Así es, Timex. La compañía célebre por sus aguantadores relojes de pulsera fue de las primeras en comercializar computadoras personales, allá por 1981. Este remedo de computadora cabía prácticamente en la palma de tu mano, tenía un teclado de membrana (sí, como los de tu horno de microondas), y poseía una inusitada memoria ROM de 2K. Sí, 2K. Un obtuso cubo que se le conectaba atrás la expandía a un impresionante 16K. O sea, más de lo que mide la foto de tu avatar en Twitter. Se conectaba a la tele, pero los gráficos eran en estricto blanco y negro. Los programas venían en cassettes de audio, así que había que conectarle una grabadora cada vez que querías guardar algo, correr un rudimentario procesador de palabras (menos práctico que una máquina de escribir, francamente) o jugar uno de los arcaicos juegos que, siendo controlados por el pinchérrimo teclado, eran más frustrantes que otra cosa. Por principio de cuentas los mejores juegos de la Sinclair no eran ni lejanamente cercanos a los peores de un Atari 2600, así que se pueden imaginar. Después de varios infructuosos meses intentando sacarle provecho, se la vendí a mi primo. Perdón, primo.

El mastodonte: Texas Instruments 99/4

TI 99/4: Más pesada que Precious...

Para la época era impresionante, pero sólo por su tonelaje. En efecto, tras la ligereza de la Sinclair, mi papá se trajo a casa este monstruo tamaño Godzilla que había comprado para la oficina, pero que sustituyó de inmediato ante la oportunidad de comprar unos equipos Canon más apropiados para las labores de contaduría de su despacho. El caso es que heredamos este coloso. El teclado era incómodo, aunque no tanto como el de su predecesora, y tenía una gran ranura frontal donde se empotraban cartuchos (onda Atari o Nintendo) que contenían lenguajes de programación (Basic era el más utilizado), aplicaciones o juegos. Pero ahí va lo interesante: esta compu ya funcionaba con floppy disks de 5″ 1/4. El monitor era a color (¡16 de ellos!), y tenía sonido. De hecho alguna vez escribí un programita que emitía una secuencia ascendente de sonido que iba desde lo más grave hasta lo inaudible para el oído humano… aunque no para el oído canino, pues mis perros se soltaban aullando cuando lo echaba a andar.

Súmenle monitor, impresora, tres módulos más y apenas...

La TI 99/4 era un  monstruo. El monitor de 21 pulgadas pesaba casi el doble que dos teles Trinitron de similar tamaño, no me pregunten porqué. Y los múltiples periféricos se interconectaban en serie mediante unas ranuras del lado derecho, así que tu máquina crecía lateralmente y requería de un gran escritorio. O mejor dicho, de una gran mesa, pues no había escritorio capaz de albergar el teclado, las 3 unidades de discos, el drive manager (un artilugio sin el cual no funcionaban los drives), el interfase RS232 (no pregunten), el print manager (otro artilugio tamaño drive que permitía conectar la impresora), el módem (¿pa’ qué caraxos?) y la base del teléfono para el módem. No muy práctica, pero la usamos durante un año, aproximadamente. Después pasó a ser propiedad de mi tío, un ingeniero que sí se las arregló para sacarle provecho durante cuatro largos años. Aunque creo que no pudo usar su comedor en todo ese tiempo, pues sólo ahí cabía el armatoste.

La revolución: Commodore 128

La C128 y Newsroom: mis pininos en publicaciones de mal gusto

Después de llevar Taller de Mecanografía en mi primer año de secundaria, el Colegio México decidió substituirlo por Taller de Computación, comprando 30 máquinas Commodore 64 para el alumnado (de a dos estudiantes por máquina, con monitor ámbar). Gracias a mis buenas calificaciones en ese momento, logré convencer a mis jefes de que una compu era LA inversión. Y la C128 era LA opción: corría todos los programas de la C64, tenía 128 Kb de memoria, drive de 5″ 1/4, gráficos chidos, y lo mejor: miles y miles de juegos. Lo que los padres esperaban se convirtiese en un semillero de futuros Bill Gates pronto se convirtió en el mercado negro más activo para el software pirata. Gracias a nuestra modesta experiencia con compus caseras, algunos de los alumnos nos convertimos en «asesores» para el resto, lo que significaba un pretexto ideal para dedicarnos a copiar e intercambiar juegos en masa… todo bajo el amparo del profesor, quien no sospechaba nada y de todos modos se mostraba feliz de tener a alguien más capacitado que él para responder las preguntas de sus pupilos.

Hardball, uno de mis juegos favoritos, y el GEOWrite, primer procesador de palabras que me hizo dejar de lado la máquina de escribir.

Debo decir, sin embargo, que mi carrera editorial nació en esta era, gracias a un programilla llamado Newsroom, que permitía diseñar rudimentarias publicaciones. Aunado a una paquetería de productividad llamada GEOS (un vil plagio del sistema operativo de Macintosh que comenzaba a revolucionar la computación a nivel de interfases gráficas), debo confesar que mis trabajos escolares lucían más profesionales que nada. En otra ocasión les contaré a detalle mis experiencias con la Commodore (y su sucesora, la Amiga) en materia de piratería de software, y cómo me permitió recaudar fondos (junto con mi negocito de pelis pornos grabadas en la parabólica) para subvencionar todas mis aventuras adolescentes. Gran computadora, me duró un buen rato.

Lo inexplicable: IBM PS2

Sistema Personal 2 de IBM: Incómoda hasta en el mouse...

Mi jefe acostumbraba tener en casa alguna PC capaz de cubrir sus ocasionales jornadas de trabajo fuera de la oficina, y este bicho llegó en una de esas instancias. La idea de IBM era avasallar el mercado de las PC, así que creó una máquina llena de innovaciones técnicas y con un sistema operativo propio. El fracaso fue rotundo. Me llamaba la atención porque se manejaba con un mouse (incómodo como pocos) y porque usaba discos de 3.5″, pero fue francamente olvidable. Era plasticuda, color hueso y sin chiste. No es de extrañar que IBM se haya ido al caraxo luego de ser quien partía el queso en el negocio de las PC.

La versatilidad: Commodore Amiga 500

Amiga 500: hacía honor a su nombre. Y jueguitos como el original Monkey Island™ me hacían la tarde...

La idea de Commodore era replicar el éxito de la C64 con una compu llena de lindezas, poder gráfico y personalidad propia. La Amiga era la respuesta. Tenía un drive de 3.5″ integrado al CPU, y recuerdo haberla expandido a 2Mb de memoria RAM (tenía 512Kb de fábrica). Su paleta era de 4096 colores, el sonido era brutal, los gráficos increíbles. Sus programas de dibujo y animación estaban avanzadísimos para la época, al punto de que aún llegué a utilizar algunos de ellos para trabajos de la universidad (¡en 1994!). Como fui de los primeros en tener una de estas máquinas, me conecté con algunos piratas de la época y logré reestablecer mi negocín de venta de programas en muy poco tiempo. Y los juegos reventaban madres, la verdad.

Más jueguitos: TV Sports Basketball y Defender Of The Crown, que rifaban durísimo.

Pocos sistemas operativos eran tan agradables de usar como Workbench. A la fecha son máquinas de culto, sobre todo en Europa, donde todavía cuentan con redes considerables de usuarios. Usé la mía hasta que murió el CPU y se hizo increíblemente caro conseguir una refacción, pero la recuerdo con mucho cariño.

La frustración: Compaq Presario CDS 520

La Presario: lo que escribió el técnico francés sobre el monitor lo dice todo...

Ante la muerte de la Amiga 500, a mediados del 94, se presentó la oportunidad de comprar compu nueva en el Price Club (hoy Costco). Mi jefe tomó la decisión absolutista de adquirir una Presario, dejándose impresionar un poco por la atractiva vendedora en turno. En el papel no estaba tan mal: tenía CD-Rom (¡Ooooh!), un procesador 486 y creo que la memoria era de 64Mb, o algo así. Pero mi regreso a un sistema operativo tan terrible como Windows definitivamente me cambió el humor hacia la computadora personal. Me tocó la transición a Windows 95, con todos sus pitos y flautas, pero siempre lo encontré lento, poco intuitivo y lleno de frustrantes actualizaciones. Por no hablar de los virus: uno de ellos se cargó un sinnúmero de trabajos escolares, escritos personales y demás cosas. Y eso fue en la única ocasión en que le permití a alguien meter un disco a mi máquina proveniente de otra, bajo su juramento de que venía de una máquina limpia. Menudo chasco. En fin, la Presario corrió decentemente durante los primeros 3 meses, y después se volvió un armatoste. Después de ella desfilaron por casa una procesión de desktops y laptops basadas en Windows que mi papá traía y llevaba de la oficina: HPs, Dells, Vaios de Sony, algunas compus «armadas», pero todas con la misma historia. Windows, al fin y al cabo. Sorry, Sotorpe, pero la experiencia para un usuario casual fue por demás agotadora.

El switch: Macintosh Powerbook 5300

Mi primera Mac: La vida es bella en blanco y negro...

En 1996 entré a Editorial Televisa, en una industria donde las Macs mandan. Me sentía enormemente intimidado de probar suerte en un sistema operativo que jamás había usado. Las máquinas de redacción para los recién llegados eran las Mac Classic, esas chistosas unidades integradas con el drive y con su pantallita blanco y negro. De pronto descubrí que mis miedos eran infundados. Todo era fácil. Todo era intuitivo. Al contrario de todos los otros trabajos donde había utilizado PCs, mis llamados al departamento de sistemas eran prácticamente nulos. La verdad me inventaba problemas de vez en cuando para ver a la chave de soporte técnico, que estaba hecha una ciberpompi (quienes hayan trabajado en la oficina de Polanco a mediados/finales del 96 sabrán de quién estoy hablando).

Y claro, tenía que comprarme una Mac para trabajar en casa. O en la calle. Así que uno de los proveedores me vendió una Powerbook bastante básica, pero muy útil. Su pantalla era blanco y negro, se controlaba con una membrana táctil (o con un mouse, según se prefiriese) y contaba con 8Mb de memoria RAM y 500Mb en disco duro. Corría Mac OS 8.0, y eso me bastaba. La trabajé duro y tupido, e incluso inspiró un guión para TV llamado «La Máquina de Ideas», que el buen Alejandro Orozco sugirió para la 3a temporada de la serie «Cuentos Para Solitarios». Nunca vio la luz, pero no le hace. Amé mi primera Mac.

La revelación: iMac G3 (Strawberry).

iMac: Una auténtica joyita. El color maricón me valió madres.

En cuanto Internet comenzó a despegar, descubrí que necesitaba algo más poderoso… y a color. No puedo describir la experiencia tan singular de comprar esa primera iMac. Todo era perfecto. A los 8 minutos de abrir la caja ya estaba conectado a la red. Los colores vibrantes te llenaban. No era el espantoso armatoste que había que esconder en un rincón: nuestra iMac de recién casados se posaba orgullosa en un sitio prominente de la casa. Era un tema de conversación. La movíamos de lado a lado sin preocuparnos por cableríos interminables. Y después de extenderle un poco de cariño con una expansión de memoria al máximo (512Mb), era un avión. Le monté Office, Photoshop, Quark Express, Illustrator, Freehand y tenía la oficina entera en mi casa. El sistema operativo MacOs 9 nunca dio guerra. Sí, el mouse era incomodón, pero fue la única pseudo queja que pude tener de ella. La vendí en el 2003, antes de irme a Miami, y el dueño actual me dice que sigue jalando bien (con Mac OSX montado) para su hija de 11 años.

La presunción: iBook  G3 (Blueberry y Graphite)

Mis primeras iBook: Eran la onda.

Los viajes constantes como director de revista me forzaban a tener una laptop además de la iMac de casa. La opción, por supuesto, fue la recién lanzada iBook. Comodidad pura. Sí, el casing la hacía más pesada de lo que podía haber sido, pero la verdad nunca me quejé de ello. Otra compu que causaba envidia y generaba conversaciones con perfectos desconocidos. Abrirla en un avión era un alivio para mi, pues podía editar textos, escribir artículos, ver películas, escuchar música y jugar durante las 3 horas y feria que duraba una carga completa.

¡Practicidad absoluta!

Reemplacé la azul por la grafito para contar con algo de poderío adicional. Natalia tuvo a bien arrancarle gran parte del teclado, y creo que se tragó la «D» y la «N», cuando tenía como 6 meses de nacida, pero aún funciona. La compu. Y Natalia también, de hecho.

La renovación: iBook G4

iBook G4: Muy resistente a refrescos derramados, por cierto.

Cuando Apple abandonó los diseños clamshell de las iBooks, decidimos comprar uno de los nuevos modelos en color blanco. Eran máquinas compactitas, cómodas y sorprendentemente poderosas, pues corrían Mac OSX como sistema nativo. Nuestros primeros meses en Miami se vieron beneficiados con rapidísimas conexiones a internet y con el uso cotidiano de foto y video digital, además de mi primer iPod. Así que ésta maravilla muy pronto se convirtió en el centro de nuestra atención. Mi suegro se la quedó y le compró a mi esposa un modelo más nuevo, como reemplazo.

La belleza pura: iMac Intel

iMac Intel: Estoy enamorado...

Claro, pronto llegamos a la era en que una compu para la casa no fue suficiente. La iBook se convirtió en máquina de uso exclusivo para Anilú (quien se la podía llevar a la alberca, al mall o a casa de sus amigas) mientras yo tenía una máquina grande para mis necesidades propias. Mis papás, medio apenados por no haberme dado regalo de cumpleaños durante tres años consecutivos («Es que estás hasta allá, en Miami…») se enteraron de mis planes para comprar una compu nueva y me sorprendieron con este regalazo. Ya las conocen de sobra. Fueron pioneras de integrar CPU y drive en la misma unidad de monitor plano, y son unas xodidas obras de arte. Mi compu ahora duerme tranquilamente en una bodega de Miami, llena de programas, escritos, fotos y videos. En ella comencé a bloggear, a tuitear, a producir mi primer podcast, a editar los videos de mi hija. Anilú la usó para escanear y editar sus obras maestras de scrapbooking. Natalia se tomó fotos con Photo Booth, navegó páginas infantiles en KidZui y grabó canciones en Garage Band. Los tres tenemos nuestros respectivos perfiles de usuario en ella, y cada uno refleja mucho de lo que somos. Eso está chido.

Y hoy en día…

iMac Aluminum: ¡METAAAAAAAAL!

Cada quien la suya. Le compré una MacBook de aluminio a Anilú cuando creyó haber echado a perder su iBook G4 blanca (le tiró un refresco encima). El diagnóstico era que la pobre laptop estaba desahuciada, viviendo horas extra en lo que el líquido acabase por arruinar los circuitos interiores. Eso fue hace más de un año. A veces un par de teclas se repiten al oprimirlas, pero fuera de eso sigue jalando a la perfección. Hoy es la compu de Natalia, y me la presta cuando necesito una portátil. El resto del tiempo utilizo la iMac Aluminum 24″ que convencí a mi papá de comprar después de años y años de frustrante uso de Windows. Ahora el pobre al menos puede bajar fotos y video, usar e-mail y chatear en video con su nieta sin mentar madres hasta el cansancio. Mi papá es de otra generación, eso es obvio. Él ve a las compus como una solución, ocasionalmente, y como un mal necesario el resto del tiempo. Mi mamá ni se les acerca, cree que son obra de Belcebú.

Pero yo les he cobrado afecto al paso de los años. Me recuerdan la diferencia de trabajar en ellas, ante la vieja alternativa de las máquinas de escribir mecánicas, con su corrector al lado y su papel carbón «para sacar copia» de lo escrito. Me recuerdan la transición de impresoras Daisy wheel, dot matrix, inyección y láser. Me recuerdan los estridentes tonos del módem al estarse conectando a Internet vía dial up. Me recuerdan toda clase de medios de almacenamiento: cassettes, cintas magnéticas, floppies, SyQuests, Zip y Jaz drives, memorias flash. Me recuerdan marañas de cables y conexiones inalámbricas. Joysticks, track balls, tabletas, plumas ópticas y más ratones que una bodega de la central de abastos. Los Chicos Computarizados y Concursor. La revista Byte y los albores de Wired. Me recuerdan lo avanzado que se me hacía mi reloj Casio con calculadora y lo impaciente que puedo ser con mi iPhone, pese a sus millones de aplicaciones y conexión a Internet en donde quiera que esté. Me divierte discutir con los apologistas de Windows (desde mi propio hermano hasta mis queridos lectores) y especular sobre lo que estará pensando Steve Jobs ahora que el iPad le deje de interesar.

Y claro, me divierte pensar en lo que me falta por ver. Aún no pierdo mi capacidad de asombro.

43 comentarios en “Las compus de mi vida

  1. Pingback: Las compus de mi vida « Finísima Persona

  2. Yo soy de la generación Windows. Empecé a usar una computadora a los 3 años (más o menos), el primer sistema operativo que usé fue Windows 3.1 y, por alguna razón, me infundaron el miedo a no tocar nada porque se echaría a perder la máquina. Craso error, porque con o sin miedo siempre las echaba a perder (según dicen, aunque creo que es por otra razón).

    El SO con el que más me encariñé fue con el Win 98 SE. Mejor que el 98 común, bastante estable, podía conectar cualquier cosa a sus puertos USB y lo reconocía al instante y la verdad es que tengo buenos momentos con éste. Lamentablemente ya está en desuso y prácticamente es obsoleto, aunque hay uno que otro cajero de RED que sigue con 98.

    También pasé por Win ME, una probadita de lo que vería en XP, o más bien mis pesadillas hechas realidad. A cada rato me salían pantallazos azules, la paleta de colores era horrible, la interfaze bastante vieja (era 98 pero con retraso mental) y a menudo se me infectaba de virus. Mándamos al carajo la ME y nos compramos otra, porque teníamos una Compaq Presario con bocinas JHL (ay… wey!) que sonaban y siguen sonando chingonas, pero el equipo quedó hecho un asco.

    Conocí XP gracias a las compus de mi colegio, pero no me acostumbraba a ver todo de color azul con verde y algunas cosas eran bastante confusas, pero poco a poco le fui encontrado la maña. Al final aprendí a instalar un SO por cuenta propia (sí, nadie me enseñó, yo solito aprendí, xD) y a buscar los drivers porque accidentalmente le di en Formatear C:, así fue como perdí todos mis archivos =/

    Luego de que mi compu con XP se fuera al carajo (ni como ayudarla) me regalaron una lap Gateway con XP pero tenía unas fallas, así que lo volví a instalar y aprendí a hacer a particionar un disco duro para salvar mis archivos. Tiene 1.2 GB de RAM y disco duro de 40GB (de las primeras que salieron con XP), quema CD y no DVD, no soporta Win 7 (lástima) y le tiene miedo a Ubuntu, ni modo. Proximamente tendré una netbook, dudo de qué marca pero probablemente tendrá 2 SO, uno será XP y otro Ubuntu =D

    Saludos.

  3. Excelente!!!

    Debo confesar que por mis manos no han pasado mas que compus con Windows, desafortunadamente, porque la neta ya me tiene cagado.

    Y por eso me considero un ignaro en situaciones computacionales

  4. huy pues mi buen sempere aqui tu amigo una suma de muchas inconsistencias en su vida
    me encantan las carreras de coches- odio manejar (una vez en juarez compre un munstang pinto 82 solo le di una vuelta ala cuadra y se quedo estacionado mas de 8 meses)
    colecciono mh desde su transicion de hombre saludable a mh y hasta ahora- y no hago ejercicio ni por error
    mis sobrinos tienen puras macs, tienen ipods, yo solo tengo una lap q usa windows (y si prefiero las macs y un ipod (q cuando lo meto al itunes me dice «tu ipod esta corrupto » todos dicen no mames como le hiciste para esa leyenda?, tengo tele con quien csabe cuantas madres
    en pocas palabras
    no dejo de sorpenderme de los avances tecnologicos pero todos se sorprenden de mi pendejismos para la tecnologia

  5. excelente timeline de la adquisición de computadoras.
    Recuerdo que la primera que hubo en casa fue una Commodore 64, que incluso, aun sobrevive ya que mi papá se la vendió a mi tía pero, según ella, gastaban una laniza en luz. Después lo usual, una desktop de Acer con windows 3.1 que mi papá resguardaba celosamente en su oficina (una vez me regañó porque entre a una aplicación que no era). Años más tarde, por la misma necesidad de su pequeña hija (o sea, yo) me compró una compaq que funcionó bien hasta que le di en la madre y me la catafixió por por una VAIO de 512 mb en ram y windows XP, aunque realmente deseaba una iMAC de colores, pero siempre me decía lo mismo «la paquetería es cara y no es compatible con Windows».

    Total y después de 2 laptops (una compaq con xp mega amalandrada y una gateway rosa pepto bisbol con windows vista que compre de emergencia porque la pantalla de la compaq se me chingó un 26 de diciembre), mi sueño se realizó y le compré a un conocido la macbook de aluminio que lanzaron en el 2008. una maravilla total y absolutamente que me aguanta toda mi paqueteria de edición de video (final cut, after effects, premiere) y diseño (photoshop, illustrator) y alguna que otra tontería. Todavía no la exploto como deberia pero definitivamente fue mi mejor elección. Facil y no causa broncas como los epic fails de pantalla azul del windows.

    Mi papa sigue insistiendo que no es compatible con windows, pero sólo que tenga una tarde disponible se la prestaré, a ver si cambia de parecer y se anima a comprarse una.

    microsoft fuchi guacala yaaaaa!

  6. Yo soy de Windows 98 hacia adelante, la primera computadora que tuve la compro mi madre debido a que se metió en el negocio de las máquinas de bordar y era necesaria una computadora, de esa primera computadora aun sobrevive el monitor.
    Me gustan las Mac, cuando realice mi año final de la carrera trabaje con una Power Mac G4 y era una belleza. Actualmente uso Linux como sistema operativo y estoy encantado, pero uno de estos días tendré una portátil Mac en mis manos.

  7. MMM, bueno, Yo soy Windows User 100%, pero en ningún momento me desagrada usar las mac´s, de hecho tengo en mi casa una imac, pero sólo la utilizo para abrir archivos de «mac» por ejemplo de el extinto freehand, harvard graphics, Quark Xpress, algunos clipart mamones, y algunos estilos de fuente solamente existen y se ven bien en Macintoch, eso lo admito.

    Cuando trabajaba en la SEP y me metí en el Depto. de diseño, como por decir los títulos profesionales y documentos que van con medidas y estándares por demás precisos, si me he ayudado con la Mac, lo admito.

    Como he comentado mi principal motivo por el que no me gustan las macintosh, es que el usuario promedio, la compra sin saber manejarla, la quieren para el messenger, bajar porno y jugar juegos piratas y cuando por fin entienden que la cagaron, vienen conmigo a que les arregle sus desmadres y es donde ya no me agradan.

    Yo mi primer computadora fue una ensamblada por mi Tio Alberto, una 486 con la cual me ayudaba a pagar la universidad, a la cual entré a los 16 años, capturando y formateando tesinas, de ahí en delante todas las computadoras que he tenido las he ensamblado yo mismo.

    Normalmente , no las formateo, siempre se mantienen a la misma velocidad hasta que las regalo, y pues obviamente nunca tengo el problema de virus, aunque como mucha gente sabe, yo soy enemigo de los antivirus, mis clientes normalmente entienden con una o dos veces, cuales son los errores comunes de las infecciones.

    1.- Abrir cosas en el messenger que nadie te dijo que abrieras.
    2.- Abrir correos con archivos o ligas sospechosos y siempre me dicen «se me hacía raro que banamex me pidiera la tarjeta si ni cuenta tengo ahi» o «es que decia que «alguien» me mando una tarjeta de cumpleaños, pero hoy no es mi cumple»
    3.- Memorias USB, esto es lo más chido ningún antivirus las limpia, y los que «detectan el troyano» lo hacen cuando la coimpu ya está infectada, así que de oquis.

    Es más, deberías permitirme hacer un post extensivo de como prevenir o al menos como saber que tu compu tiene virus, Sam Pérez.

    La verdad disfruto mucho, pelear con Toñolele, El Jara, Anilú, y los demás Mac users del twitter, es la pura vida estar dando argumentos, y rebatirlos, pero real, realmente pues es gente especializada la que procura usar la mac, como he dicho «gente que sabe lo que quiere»

    Pero yo soy feliz con windows, mis compus nuncan marcan error, nunca estan lentas, nunca batallo con el internet, pero si me gusta que tengan buen hardware, tengo mis estándares en marcas.

    Y pues me pongo a sus ordenes para cualquier cosa.

    Besitos.

  8. Mi papá es todavía más luddita que el tuyo, Toño. A él realmente no le pudimos hacer que nos comprara una videocassetera hasta que ya estaban por salir los DVDs, y eso porque se la compró a su mamá cuando nadie más se la compraba. Jamás nos compró un Atari, un Nintendo, no sabe qué es un PS3 ni un Xbox 360, se pasmó cuando vio a su consuegro jugar tenis y baseball en el Wii… y auténticamente me prohibió ir a las maquinitas una vez en 1991, porque leyó en el periódico que había una epidemia de virus por computadora. No, no es chiste. Lo juro. No lo es.

    Cuando quiso poner una computadora en el estudio de la casa, no nos llevó a asesorarlo. Llegó en 1992 con un maquinón Acer que no corría con Windows, un vejestorio que el vendedor lo consiguió convencer de llevarse, con un instructivo de unas 1800 páginas distribuidas en varios tomos. Con suerte usamos el WordStar para cosas de redacción, y los pocos juegos que le pude meter eran clásicos de los 80. Fue la primera y última vez que dejamos decisiones de tecnología en sus manos.

    La siguiente fue una compu armada en 1998, con el flamante Windows 98 instalado. Finalmente estábamos al día con el mercado. Pasaron dos años antes de que quisieran ponernos internet, y eso por exigencias de trabajo, porque le tenía el mismo recelo que a la TV por cable: que la corrupción de nuestras almas entrara a nosotros por una máquina.

    Después de eso, creo que se ha actualizado una o dos veces, y eso a insistencia de mi hermana de en medio y mi cuñado, ingeniero en sistemas.

    Yo por mi parte, acabando carrera y tesis lo primero que hice al empezar a trabajar fue ahorrar unos meses para mi propia compu. Y me he actualizado un par de veces, todas armadas. Actualmente tengo una que me permite fácilmente cumplirle las exigencias al AutoCAD y al 3D Studio MAX, que con su tarjeta de captura de video me pone la TV por cable en su monitor. Y lo mejor, es una PC con tarjeta decente que me deja jugar mis videojuegos favoritos, sin bronca.

    Mi próxima máquina está todavía un par de años en el futuro. Para entonces el Blu-Ray será común, un monitor hi-res de 22″ o más no me vendrá mal, y si hallo la manera de conectarle el microondas y la sandwichera, nada más me faltará instalarle una fleshlight para ser feliz con ella.

  9. worales! ha tenido ud mas modelos de computadoras de los que yo tenia conocimiento que existían..

    en los extraños 90´s no era tan común que alguien tuviera una computadora en su casa (al menos en mi rancho), la primera vez que me acerque a una, fue en la prepa.. y me tocaba programar en MS-DOS…

    la primera computadora que cayo en mis manos fue una IBM, la cual me duro hasta que me gradué de la universidad, en ese inter, papa compro una laptop IBM la cual sigue dando batalla (fue donada a mi sobrino, para que pueda hacer sus tareas allí, a fin de cuentas, el no sabe que Windows 95 significa.. «año del qihuboles»)

    actualmente (e inexplicablemente) tengo a la «Sra. Petope» una coqueta Thinkpad de IBM, la cual contra toda predicción me ha acompañado durante mas de 5 años… (aunque es buenísima, su tarjeta madre no aguanta un disco duro decente, así que me conformo con el de 40 Gb que trae… poco practico si te dedicas al negocio de los gráficos)

    próximamente emigrare a algo mas practico o a lo que viene siendo mi sueño guajiro… iMac 27pulgas…

  10. Yo soy mac-ero y no regreso a Windows, gracias… En mi trabajo tengo una mierda de dell que si fuera persona en septiembre entraria a 1o de primaria, ademas con xp, eso si, con office 2007 lo que la hace burrisima para trabajar. Soy fan de los productos apple por que son amigables de usar e innovadores, no tengo iphone por mi cruzada personal vs Telhell y uso una Palm Pre pero creo que el proximo cel. sera un iphone.
    Sr. Sempere, muy interesante su post, yo la verdad de las viejitas solo recuerdo la commodore 64 que tenian en casa de un amigo, yo soy como de MS-DOS y los discos floppy de 5 1/4 para aca en cuestion de PC’s.

  11. Pues ora verás…

    Yo entré a estudiar «computación», en 1983, cuando te daban «conocimientos básicos de perforista IBM», COBOL, D-BASE. PASCAL, y FORTHRAM, manejando unas Mcintosh monocromáticas… de todo ese caudal de conocimientos, no me queda absolutamente nada… luego, mi gran amiguis de la Secu, tenía la Commodore 64, y luego nos íbmaos a jugar, aunque la neta, siempre fui retependejo… Yo llevé taller de Taquimecanografía los 3 años de la Secu (en la siempre gloriosa Escuela Secundaria Anexa a la Normal Superior de México) y para asombro de mis compañeras actuales de trabajo (edad promedio 25 años, o sea nacieron cuando yo estaba en tercero) les sorprende sobremanera que a veces, de mamón, escriba notas en taquigrafía… ¿así, o más ruco?

    La primera que hubo en casa, fue una Presario (a pesar de que yo neceaba para las Mac, en base al comercial del niño: «¿Papá, y los dinosaurios? Mejor me voy con Pepito, el tiene una Mcintosh» o alguna mamada por el estilo) que pues si dió batalla, y la verdad, pues aunque me sigan tildando de pendejo, pues me las apaño con Windows… En mi trabajo, usaban el Linux, y nunca le agarré la onda… Claro, que como soy trabajador social, pues realmente lo único que utilizo es Excel y Word, por lo que no me genera mayores problemas

    Actualmente, tengo una armadita comprada en la Plaza de la Computación, y no sé ni cuanta memoria, ni la chingada, sino lo que me encantó fue mi monitor LCD de 24 inches pulgadas… y gracias al excelente servicio de internet que me da Axtel (espero que lean esto y me hagan un descuento, cabrones) pues ando «bien felipe y con tenis» en mis andares cibernáuticos…

    Algún día me compraré una Mac, nomás pa ver que se siente… Besitos

  12. Jaja ahora si no iba a comentar nada (y eso que hoy estuve a punto de cambiar de mi modus operandi PC a MAC así sin saber nada del asunto -gracias eljara por la asesoría-), pero lo de «Cuéntanos más abuelo Toño» fue lo mejor del día jajaja, y es que hoy he tenido ichus con la edad, alrededor del tema Colosio.

  13. De computación empecé a saber a la edad de 10 años. Preocupados por mi futuro, y en búsqueda de tener algo en que mantenerme ocupado pues era hiperactivo, mis papás me meten a un diplomado técnico en computación e inglés. Windows 3.1, MS-DOS, Lotus 123 y juegos como DAVE amenizaron mis clases y viernes de juegos. Me tocó la era del auge del correo eléctronico en correoweb y los foros de mIRC y LatinChat. Sólo dos computadoras tenían Windows 95 así que no fué sino hasta los 12 años cuando ya sabía desarmar la compu y todo el rollo que empecé a utilizar Win 98.

    Mis papás son parecidos a los de Toño, mi padre piensa en computadoras como algo obligatorio en su trabajo y que necesita aprender a usar a sus 63 años. Mi mamá las odia, aunque fue por su rechazo a las computadoras que fuí a caer a trabajar en un ciber, donde me hice diestro en el ensamblado de computadoras, instalación de software y varias mañitas más con el difundido Win XP. Fué hasta 2005 que pude tener en casa por fin, una computadora para la escuela [casi saliendo de la prepa] y que fué víctima de todo tipo de experimentos y desastres. Traía 512 MB de RAM, 80 GB de Disco Duro y un procesador AMD Duron de 1.2 Mhz; el disco duro aún lo utilizo en mi actual PC que ya casi cumple un año conmigo y que yo ensamblé. Esto me ha ayudado muchas veces para pagar trabajos en la universidad o terminar el mes; incluso en las prácticas profesionales creen que estudio Ingeniería, pues salgo al quite de lo que el Depto. de Sistemas a veces no hace.

    Nunca he gozado de una posición económica pudiente. Soy digamos de esa clase media; por lo que fué ahora en diciembre que por fin pude hacerme de una lap, y debo admitir que @eljara [y una maestra de la universidad que es mi amor plátonico] ya me habia convencido de hacerme de una macbook, pero el precio era $3000 pesos más del dinero que había podido juntar [para variar, mis papás son enemigos de los créditos]

    La lap trae Win7, nunca utilicé VISTA, y no me quejo de su rendimiento [ya optimizado al modificar registro], pero nunca podrá compararsele al rendimiento de una mac en software y hardware [a 3 meses de uso el altavoz derecho ya no sirve y ayer el botón de expulsión de la unidad de discos se quedó trabado].

    Espero ya poder trabajar y ya poderme comprar una mac, y un estereo, y una guitarra, y…

  14. Yo empecé con windows 3.whatever en el trabajo de mi mamá y luego en casa de mi tía. En ese tiempo pensaba que todas las computadoras tenían que traer windows. La primera computadora que tuve fue una HP por ahí de 1997-1998. Con su poderosísimo pentium 2 era la puta onda del momento. Me enteré que toda tecnología deja de ser util en un par de años de la peor manera: mi super HP no pudo correr el juego del episodio 1 de Star Wars. La desilución fué enorme.

    Sobreviví con ella por muchos años a pesar de los constantes virus. Cuando mi hermana se fué a xalapa se compró una compaq con las vocinas JHL que si eran la puta onda. Cuando regresó la HP estaba a dos segundos de morir, ni ponerle más ram pudo salvarla. Empecé a usar la de ella que para mi horror tenía windows ME: marcaba error desde que booteaba. Cuando finalmente el ME crasheó, le puse XP. Su poca ram apenas y alcanzaba para que corriera. No duró mucho.

    Finalmente mi hermana compró una lap acer que prometía mucho y cumplió muy poco. El wireless se tronó a los dos días. Solo tiene 30 gb de espacio aunque para mi fué una maravilla después de haber sobrevivido con 5gb o menos. Traté de jugar WoW con ella, pero sus 256 mb de ram hacian de la experiencia al jugar un verdadero calvario. El tiro de gracia fué la jodida pantalla, que pueden leer una cronica rápida por acá http://esamostaza.wordpress.com/2010/03/23/smashed/ (sorry por el spam).

    Desde esa HP con pentium 2 no he conocido la descencia en una computadora, espero que encontrando un trabajo eso cambie.

  15. Pues yo compré una HP dv7 en EEUU el pasado diciembre, 17 pulgadas de alta definición, 4 Gb de RAM, 500 de DD, Core 2 Duo, blu ray etc etc, se supone que era de lo mejorcito… para inicios de febrero ya estaba de viaje rumbo a HP para hacer válida la garantia… No valio los 17 mil y tantos pesos, ahora se lo ingenuo que fui, debi comprar una mac…

    sad

    😦

  16. muy buen post y se ve que el SEMPERE era pudiente con tanta compu.

    En mi historia personal la primera compu fue una COMMODORE 64,
    pero la neta fue más por los juegos y como aliada del INTELLIVISION
    que como compu.
    Lo más que hacíamos era poner unas líneas de BASIC.

    «MI» segunda compu, y pongo entre comillas el MI porque realmente no era
    mía, sino de un primito que vivía cerca y yo me la vivía ahí…
    fue una APPLE IIE, con su monitor en verde y negro y donde pasabamos
    horas jugando WOLFENSTEIN, por ahí del 86-87…

    Por mucho tiempo jodí a mi papá que me comprara una compu.
    Iba a ser una HP windows x.x. ni me acuerdo. Pero por x o y siempre
    se salía con la suya y no la compraba… y ahora doy gracias de que no lo hiciera.

    En 1995 entré como redactor a una agencia de publicidad y me dieron una
    MAC CLASSIC de esas que contó TOÑO. y se hizo la luz en mi vida cibernética.
    En 1996 fui a comprar mi primera compu, me acompañó mi papá y el de la tienda
    de compus de galerías coapa nos vió con cara de ahi vienen estos que no compran nada.

    Cuando vió que iba en serio nos enseño una nueva HP, que mi papá ya estaba por
    decir que sí. Cuando yo dije… NI MADRES… quiero la APPLE MACINTHOSH PERFORMA 5250.
    Ya no recuerdo la configuración pero era un avión en 1996.

    Después han pasado por mi vida laboral puras MACS desde la 6500 hasta powerbooks, imacs
    ibooks, macbooks.

    Ahora en casa para mi uso personal tengo una POWERBOOK G4, que aunque viejita sigue
    corriendo como las grandes. Mi mujer tiene una MAC AIR. Y mis hijas, más por insistencia de su mamá que porque yo estuviera de acuerdo, tienen una COMPAQ -quesque porque en la escuela 0 en kinder háganme el favor, les enseñan con windows… bullshit-. Pero siendo honestos la han usado 2 veces.De hecho, ninguna de las dos la quiere usar porque… NO TIENE MANZANITA e incluso me dijo la miss que les da «computación» que María, la grande, le preguntó que porque no tienen compus con manzanita como la de su papá. 😀

    Mi mujer siempre fue de Windows, aun estando en publicidad. Pero fue hasta que ya vivio con un
    MACADDICT que empezó a usarla más y ahora en su chamba actual que le dieron una MAC, que ya también es fanssssss (aunque no tan freak como yo)

    Como última anécdota, cuando nos ibamos a casar que fuimos a poner la mentada mesa de regalos.
    Acordamos que todo lo que pusiera lo iba a escoger ella (sábanas, portaretratos, platos, licuadora, horno, incluso la TV, DVD, VHS, y demás) que lo único que YO iba a escoger para comprar en la casa era la compu… y esa iba a ser SI O SI una MACINTOSH, no había otra opción.

    Y así ha sido y así será mientras se pueda.

     MAC RULES!!!!

    y me caga que ahora muchos tengan su estampita de MAC en el coche sólo porque venía
    en el ipod y no por ser MAC USERS…

  17. El maese es todo un apple fan bien por él si yo tuviera el dinero me compraría una mac. Pero ni pex habrá que esperar, la Vaio de mi papá con su Windows 7 está más que bien

  18. ¡Ah pillo!… al ratito vas a estar insistiendo que la pornografía brasileña es mejor que la sueca, o que la pecsi da menos agruras que la Coca, y que prefieres un disco de Maná a uno de Jaguares… Vende caro tu amor, Aventurera

  19. A mi me regalaron mi primera PC por el 97 con el fin de aprender y mejorar en la primaria (cosa que no hice), provando el modernicimo Windows 98 (que yo no senti problemas para usar ese OS). Y le saque provecho para jugar emuladores de Super Nintendo, Sega Genesis, Game Boy y por ultimo NEO-GEO. Aunque lamentablemente para cuando intente usar ese ultimo mi PC ya estaba hyper madreadicima de tanto mugrero que le meti (recuerden que un niño chiquito no es muy precavido con la tecnologia).

    Conoci las Macs en una visita a Office MAX. Cuando entre y vi esa maravillosa maquina tan seductora tuve un orgasmo en seco. Tan colorido, sencillo, brillante, pero todo eso se tuvo que quedar hasta ahi cuando vi el precio y me quede como niño pobre embarrado en la bitrina de la tienda (u_u).

    Y otra cosa que e aprendido es que las mujeres no se llevan bien con la tecnologia. E tenido que salvar a mi pobre novia de los sustotes que se da cuando el antivirus le dice que se actualizo y de mis compañeras que me piden que les baje peliculas, programas o cualquier chucheria tecnologica (y que tambien estan estudiando la misma carrera de informatica ¬_¬).

  20. Pingback: Tweets that mention Las compus de mi vida « Finísima Persona -- Topsy.com

  21. Me sorprende la buena memoria de todos los lectores y del buen Sam Perez, la verdad yo no recuerdo ni tengo idea de que modelos fueron las primeras computadoras con las que tuve contacto, recuerdo a lo mucho algunos juegos y demos de juegos a los que llegué a poner mis manos encima pero son recuerdos muy vagos.

    En cuestión de sistemas operativos siempre he usado windows, al menos asi lo recuerdo y no me arrepiento, me sirve para lo que lo uso; juegos indie, estoy casi seguro de que corren mejor La-Mulana, Spelunky, Cave Story, et cetera et cetera en windows que en Mac y yo soy un gamer y fanboy de esos juegos.

  22. Hay a quienes los rulea MAC, habemos quienes elegimos decirle no a la Corporación. Yo reto a todos los Mac adictos a que me convenzan de su marca, a ver si tan chida, por la vía de cooperar y regalarme una Mac nuevecita.

    Acepten el reto o acepten ser owneados.

  23. A pesar de tener bastante tiempo ingresando a este finisimo lugar, es mi primer comentario.
    Mi primer contacto con una compu fue con una Acer que corria win 3.1 y tenia «40 mb» de disco duro, años despues me compre mi primera compu armada, y crei que nunca iba a poder ocupar todos los 4 GB de disco duro (iluso), y mi tercera y ultima es una laptod Dell Inspiron 6400 que no me ha dado problemas (bueno una vez se descompuso mi disco duro 5 dias antes de que se acabara mi garantia, afortunadamente me lo cambiaron sin costo alguno) y le pongo y le quito todo lo habido y por haber.
    No he tenido la oportunidad de ponerle mis manos a una MAC, ya llegara ese dia. Por el momento soy totalmente PC.
    Y yo creo que la mejor computadora es la que te sirve para lo que la necesitas en ese momento.

  24. PACO&MOLOTOV: Yo creo que Windows 98SE fue el último Sindows que usé con frecuencia. Ahora me ha tocado Vista y Win 7, en las laptops de mi jefe y de mi hermano, pero hasta ahí. Me provoca ternura la gente que se emociona con todos su features, que yo llevo usando en MacOS X desde hace cinco años! XD
    NAUFIG: ¿Cuál tranza? En aquella época el software era pirateado o no había software. Casi nadie vendía programas en México. O al menos es lo que le diré al juez, de ser necesario.
    FERRARI1: Eres un hombre de contrasentidos, no me extrañaría que estuvieras contemplando cambiar tu moto por un caballo. ¡Y ya deja en paz al Sotorpe con los albures, aprovechado! ¡Deberíamos festejar ese dejo de inocencia, no cargarle calor!
    NUDUL: El eterno argumento de que «no jala con Windows» murió desde que salieron las Mac Intel, hace ya 4 añitos. ¡Díselo a tu jefe! ¡Dos compus en una!
    GABRIEL: Un gusto leerte por acá. El Linux se maneja a gusto, no cabe duda.
    LE SOTORP: Ya sabes que ubicarte como el enemigo número 1 de Steve Jobs es wasa, al menos tú sí sabes usar tus máquinas Windos. Claro, eso te ubica en el 0.000001% del demográfico, pero velo por otro lado: toda esa gente que tiene broncas con sus compus te mantiene el negocio con buena $alud!
    VERTEBREAKER: Tu compu con sandwichera, microondas y fleshlight integrados tiene potencial comercial. Hablemos en mi oficina. Pero no te confundas, yo no compraré el iPad hasta que le mejoren todas las obvias carencias que ya le he notado (cámara, no tiene multitasking, etc).
    JAVO: Aguanta la Mac de 27 pulgadas, la primera generación ha salido con algunas broncas en los displays. Mi lema es esperar siempre a la 2a generación (como con ese iPad espurio que están anunciando).
    STINKFIST: Mi experiencia usando las dos palatformas (Mac y Windows) en labores similares acabó por convencerme del todo. y miren que no es nada contra las compus, todo se resume al sistema operativo.
    YORKPERRY: Eres un asno! XD Quieres escuchar algo más ruco? En el despacho de mi jefe llegó a haber máquinas con floppies de 8 PULGADAS!
    CHILANGOZANGANO: ¿No te tocó programar en LOGO? En el Colegio México nos empezaron a dar ese curso. Qué viaje…
    MOMIS: Pues enhorabuena si ingresas a las filas de nosotros los MACuarros (o MACacos, como prefieras). ¿Te ríes de mis canas, acaso? ; )
    JAMES CAMARON SOTE: ¡Amén!
    THE HUNGRY JD: Sí, es obvio que a las Macs no les ayuda el precio. Aunque por lo que duran funcionando a buena capacidad, puedes usar el argumento de que el costo extendido a lo largo de su vida útil justifica la inversión, pero siguen siendo un madracín a la hora del desembolso de entrada.
    STINKFIST: Intel inside… idiot outside.
    IXTEPAN: Sorry por lo de tu pantalla! Pero sí, uno se lleva sus buenos chascos con la capacidad (o supuesta capacidad) de las máquinas.
    FER GALVAN: Triste caso, pero así es. Creo que Dell es de las más confiables, pero insisto que mucho de la bronca yace en el sistema operativo. El rollo no es tanto apoyar a Jobs y a Apple, a fin de cuentas ellos hacen un producto caro, pero que le genera un índice de satisfacción altísimo a sus consumidores. La bronca real es que la saturación del mercado que logró Microsoft en su momento terminó por limitar la competencia sana. Ni hablar, ése sí es un monopolio donde la gente mienta madres casi a diario.
    ELJARA: Usté sí es MACaco de hueso colorado, de cuando la manzanita era a colores. A mí también me cambiaron mi Classic por la Performa 5250 (y sus bocinotas!) en la chamba. Y en Miami tuve G4 y G5, todo un deleite. Creo que con esas madres podías lanzar un chingao ataque nuclear.
    ALEKOO: A mi me gustan un buen las Vaio. Pero reitero… sin Windows.
    SYCKBOY: Bueno, lo de las mujeres y las compus creo que es debatible, he conocido a varias que nada más les falta hablar en binario…
    DRAGON7x2K: Si quieres una PC para jugar, es obvio que pierdes el tiempo y el dinero gastando en una Mac. Yo ya superé la etapa de gamer en la compu (a duras penas). Ahora me concreto a PS3 y Xbox 360, mientras que en la compu solo tengo algún jueguillo y varios emuladores para la pura nostalgia y alivio del ocio.
    IZUNIGAR: Un honor que te animes a comentar, recuerda que tu participación significa que un reggeatonero ha sido atropellado por un autobús (Elvis se apiade de su alma). Esas Dell, reitero, tiene buen linaje, no me extraña que no te haya dado broncas. ¡Sabias palabras sobre compus que cubren tus necesidades presentes!

  25. Ya no se «pelien» Las mac al igual que linux tienen su pasado Unix. De ahí que es es mas estable una Mac que windows. (lo siento sotorpe es la verdad)
    Yo soy usuario de distribuciones Linux, uso Opensuse Y Kubuntu. KDE se ve bien y es un escritorio robusto. Me desesperé de los problemas de red de Vista Home premiun. ocasionalmente lo uso, para jugar y para actualizar el sistema y el antivirus.

    Pero como dicen cada SO tiene sus ventajas

    Mac: Diseño Gráfico
    Linux: Servidores
    Windows: Jugar al Solitario

  26. buen post, yo no recuerdo mucho las chompus de mi vida. pero lamentablemente siempre he usado windows :s

    Por cierto, Toño me siento muy bien por haber contribuido y q haya menos reggeatoneros en el mundo 😀

    y por la forma en que hablan de las MAC hasta dan ganas aunque sea de usar una Por lo menos por cultura gral 😛

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